Es profesor en el Colegio La Asunción en Málaga donde imparte’Mindfulness’ como asignatura obligatoria en Bachillerato

¿Es difícil enseñar  educación emocional a alumnos adolescentes?

Según mi experiencia en el campo de las emociones, me atrevería a decir que incluso puede ser más fácil que con adultos, siempre que el trabajo  esté bien enfocado y las actividades sean  muy prácticas. Los adolescentes son muy permeables a las emociones, aunque en ocasiones no saben identificarlas son conscientes de que “algo” les pasa. Además, no suelen tener prejuicios a la hora de abordarlas, reconocerlas y aceptarlas.

 

¿Crees que iniciativas como Eduemoción son importantes para concienciar a la comunidad educativa de la importancia de la educación emocional en la escuela?

Sí, me parece muy interesante esta iniciativa, ojalá y abundaran mucho más, todavía queda mucho camino por recorrer, la comunidad educativa no está todavía concienciada de la gran importancia que supone el conocimiento y la gestión adecuada de las emociones para el desarrollo personal de los alumnos, sean de la edad que sean.

Un proyecto educativo serio para el siglo XXI, para una escuela ya en  futuro,  no puede dar la espalda a la gran potencialidad y exponencialidad que tienen las emociones como factor de desarrollo personal en cualquier ámbito profesional.

¿Qué espera de su participación en Eduemoción?

Sobre todo compartir mi experiencia profesional y el  trabajo  que hago con los alumnos en el campo de mindfulness y gestión emocional. Intento explicar la necesidad que tiene la escuela de abrir sus puertas a una nueva forma de educar, donde sea posible conciliar el desarrollo de la tecnología, que en algunas ocasiones nos tiene secuestrados, con la inteligencia emocional.

Difundir sobre todo, la importancia del  desarrollo emocional y personal como respuesta a un   proyecto humanizador que incorpore el universo emocional que somos cada uno de nosotros, la atención plena, la conciencia plena, el silencio, el autocontrol y la compasión.

¿Crees que es necesario en las escuelas una asignatura en educación emocional?

En este momento presente no es sólo necesario, tendría que ser obligatorio. Una educación inclusiva debe incorporar el autoconocimiento  como eje vertebrador de desarrollo personal.

Ya es hora de poner como centro de la educación a los  verdaderos protagonistas de la escuela, los alumnos, que demandan cada vez más, la necesidad de una nueva escuela que integre de forma incondicional el desarrollo del universo emocional. La  empatía y la compasión se han convertido en claves fundamentales en el mundo de hoy para  la convivencia humana.

El nuevo modelo educativo para el siglo XXI tiene que dirigirse a la propia interioridad humana de los alumnos, el autoconocimento personal es y será una de las claves de progreso y  de desarrollo para la humanidad