El próximo jueves 19 de octubre, Raquel Villaescusa, experta en Inteligencia Emocional, ofrece la charla «Enseñando y aprendiendo a vivir» en el Colegio Zola Las Rozas. Esta actividad, que se desarrolla entre las 17h10 y las 18h40, está dirigida a toda la comunidad educativa del centro: familias, docentes y alumnos. El Pensamiento Emocional es uno de los pilares de los Colegios Zola y por ello pone en marcha iniciativas de este tipo, de entrada libre y dirigidas a abordar la inteligencia emocional desde un punto de vista global.
Cuéntanos un poco tu trayectoria en cuanto a Pensamiento Emocional se refiere
Trabajo hace más de 20 años en comunicación audiovisual y marketing. Afortunadamente la vida me ha ido llevando por el camino adecuado. La llegada de mis hijos me ha hecho reconocer, asumir, interiorizar, agradecer, perdonar y así permitir que todo lo que corresponda me suceda. Porque no existe casualidad, sino causalidad. La maternidad de mi primera hija, hace 11 años, me convirtió en doula, acompañante emocional e informativa del proceso de la maternidad, en todas sus etapas. Así fue que descubrí que nuestros hijos son el más preciado tesoro, tanto para nosotros como para nuestra sociedad, y que por tanto cuidar de la familia es nuestra tarea fundamental en esta vida. Y para seguir acompañando, más allá de la crianza temprana, fue que me convertí en coach familiar. Pero lo que más disfruto y para lo que estoy en este mundo es para compartir todo lo que he aprendido con todo el que así lo requiera. Y tengo que deciros mi secreto: la respuesta siempre está en tu interior, yo sólo te acompaño, te sostengo y te aporto las herramientas necesarias para que lo descubras…
El próximo jueves 19 de octubre impartes la charla de inteligencia emocional «Enseñando y aprendiendo a vivir». ¿Qué vamos a encontrar los que asistamos a ella? ¿Qué podemos esperar?
A través de la toma de conciencia, escucha activa y atención plena, claves fundamentales de la gestión emocional, conoceremos y reflexionaremos sobre la inteligencia emocional, la disciplina positiva, la gestión de conflictos, las personas tóxicas, los niños eternos, la gestión de rabietas, para niños y no tan niños… Todo ello enfocado a la familia, la educación y la crianza, pero también aplicable a nivel personal y en el mundo adulto, por supuesto…
¿Crees que es importante que los Colegios ofrezcan recursos a las familias en cuanto a pensamiento emocional se refiere (como la charla que vas a impartir)? ¿Es habitual que lo hagan los colegios?
Tan importante lo considero porque estoy convencida de que si no desarrollamos desde niños nuestra inteligencia emocional, no podemos ser personas completas. Acompañar y fomentar la capacidad para gestionar y resolver conflictos emocionales es tan importante o más que sobre conflictos racionales… Y para padres y docentes, estar formados en ello compete a su responsabilidad en crianza y educación, cada cual es su faceta.
¿Cómo crees que debe implantarse el pensamiento emocional en los Colegios? ¿Crees que es una asignatura pendiente?
¡Claro que está pendiente! ¡De hecho es la gran olvidada! Vivimos tan deprisa y en una sociedad tan competitiva, sin tiempo para la reflexión, que eso es lo que les transmitimos a nuestros hijos y alumnos! El currículum escolar esta saturado de contenidos y obligaciones, no hay espacio para las emociones. Mi hija, que cursa sexto este año, lleva estudiando valores en lugar de religión unos cuantos años, y la verdad es que la aportación emocional en esa asignatura es bastante válida, pero mi opinión personal es que en el resto de las asignaturas no sucede… Estaría fenomenal que se impartiera como asignatura, pero la clave estaría en que padres y docentes estuvieran convenientemente formados en educación emocional, y desde ese prisma impartirán, criaran y educaran. Es más una cuestión de actitud, pienso yo, de toma de conciencia. Es básico saber desde donde se hacen y dicen las cosas. No consigo entender porqué está sociedad nos educa desde la no expresión de nuestras emociones y sentimientos. Es prioritario para tolerar la frustración y gestionar nuestras emociones saludablemente, tanto para niños como para adultos.
¿Qué nos aporta la formación en pensamiento emocional a los adultos? ¿Y a los niños?
Autoconocimiento, capacidad de reflexión, autoestima, valores… Todo ello es necesario para vivir plenamente, tanto grandes como pequeños. Los niños son personas, igual que los adultos, lo que nos diferencia es la experiencia vital. Aunque es cierto que hay adultos que no consiguen interiorizar y validar su experiencia vital.
Ofrezcamos pues a nuestros hijos y alumnos la oportunidad de conocerse y expresarse plenamente, para que puedan ser adultos completos; en definitiva, personas felices.